América Latina está pasando por un fenómeno silencioso pero decisivo, conocido como el «gran abandono digital», que representa un riesgo de economías locales de países como Colombia, Ecuador, México, República Dominicana y Perú. Según la plataforma, la contratación de profesionales latinoamericanos por compañías njeras creció un 55% en 2023mientras que la fuerza laboral remota en la región fue de 3% en 2019 al 30% en 2023Según los datos de Cometido. Colombia ya es la Segundo país de la región con más talento contratado del njeroSolo detrás de Chile.

Este boom plantea un dilema, los profesionales en áreas de tecnología, innovación y datos pueden funcionar a nivel mundial de sus territorios, pero en muchos casos Se desconectan del desarrollo localdebilitando los ecosistemas de innovación de sus países. «Cada profesional que se disoca de su entorno representa una oportunidad perdida para transformar las realidades locales. El desafío no es detener el trabajo global, sino transformarlo en un impacto regional», advierte Ferran Calatayud Ventura, Director Ejecutivo/CEO de Biu University Miami (Universidad Internacional de Broward).

La situación no es menor. Según la OIT, más de El 53 % de los trabajadores en plataformas digitales en América Latina y el Caribe Proporcionan servicios a clientes fuera de sus países, principalmente en los Estados Unidos y Canadá. Esto significa que más de la mitad del talento digital de la región está generando valor para las economías externas. Termine con este panorama, diferentes expertos sugieren que la clave es no detener el trabajo global, sino reorientarlo hacia el desarrollo local. La formación internacional, ya sea cara a cara o en línea, no debe convertirse en un pasaporte de salida, sino una palanca de transformación en origen. La idea es que los profesionales puedan capacitar con estándares globales y, al mismo tiempo, aplicar ese conocimiento en proyectos que fortalecen sus comunidades. Como señala Ferran, «el conocimiento internacional no debería ser un pasaporte de salida, sino una semilla de origen de transformación».

Este enfoque se traduce en cifras, un ejemplo de esto es que en instituciones como Biu Más del 60 % de los proyectos académicos tienen una aplicación práctica en las comunidades de origen de los estudiantesabordar sectores clave como sostenibilidad, turismo, educación y salud; Algunos casos específicos son:

  • En ColombiaViviana Polnaco investigó el nivel de educación financiera en las escuelas públicas en Bogotá, generando suministros para programas escolares. Nury gutiérrez Desarrolló la tesis «marca personal para el empoderamiento de mujeres cercanas a la jubilación», proponiendo un modelo innovador de inclusión digital y liderazgo femenino replicable en toda América Latina y Claudia Marcela Arena Soto Estudió el impacto de la inteligencia artificial en la dermatología, revelando cómo los futuros especialistas ven a la IA como una clínica aliada, con un gran potencial de aplicación en el sistema de salud.
  • En PerúCarlos ODAR diseñó un plan de turismo sostenible en comunidades mineras otorgadas por su potencial de diversificación económica.
  • En República DominicanaLuis Miguel Sosa contribuyó con un modelo replicable de sostenibilidad en las PYME.
  • En EcuadorGreysi Virla analizó la calidad de vida de los pacientes con enfermedad renal crónica, mejorando los protocolos clínicos en salud privada.

«Estos proyectos muestran que el escape no es inevitable, muchos profesionales logran trabajar a nivel mundial sin perder conexión con sus territorios, generando valor donde más se necesita», dice Ferran. Para hacer esto, la clave es promover metodologías que conviertan cada investigación académica en un proyecto aplicable, vinculado a desafíos reales del entorno de los estudiantes. Este enfoque se complementa con tutoría personalizada, alianzas internacionales que facilitan la transferencia de conocimiento y programas que permiten a las TESE trascender la academia y transformarse en empresas o iniciativas comunitarias. Además, los acuerdos financieros y el apoyo en países como Colombia o la República Dominicana están ampliando oportunidades para acceder a la capacitación internacional en línea sin migrar.

El La fuga digital puede Conviértase en una palanca de desarrollo si está orientada correctamente. «Los profesionales no tienen que elegir entre lo global y lo local. Pueden trabajar con empresas internacionales, pero al mismo tiempo soluciones de diseño para sus territorios», concluye Ferran.

En un momento en el que enfrenta la región Déficit de talento tecnológico y alta dependencia de capital externoLa clave no es detener el trabajo remoto internacional, sino en aprovecharlo para crear innovación en la fuente. La formación internacional en línea, bien dirigida, es la herramienta para lograrlo.

63

Redactor
About Author

Redactor