La oficina del alcalde de Bogotá, bajo la dirección de Carlos Fernando Galán, se encuentra actualmente en la fase de preparación de una presentación titulado «Bogotá, Airport City». Esta propuesta ambiciosa busca transformar el entorno de El Dorado, reconociendo su potencial para fomentar el desarrollo económico y mejorar los enlaces de conexión aéreos y terrestres. La política integral incluye un innovador paquete de estímulo fiscal, que se someterá a consideración del consejo, y que comprende la eliminación total de impuestos sobre industria y comercio (ICA) así como de activos durante un periodo de cinco años. Además, se ofrecerán incentivos relacionados con la demarcación urbana.
El objetivo primordial de esta iniciativa es atraer inversiones significativas, estimadas en alrededor de $600 millones en inversión extranjera a lo largo de la próxima década. Inspirándose en el modelo de Aerotropolis, esta propuesta prioriza una serie de proyectos estratégicos, entre los que se destacan la ampliación de la Calle 63 y la edificación de una infraestructura que integrará el transporte masivo directamente con el aeropuerto. Esta conexión no solo facilitará el acceso, sino que también fomentará el crecimiento de la actividad económica en las inmediaciones.
El Ministerio de Desarrollo Económico jugará un papel crucial en esta iniciativa, dado que se encargará de apoyar tanto a las empresas locales como a las extranjeras que deseen invertir y establecerse en esta nueva área de desarrollo. Además, la coordinación de todas las inversiones será manejada por el Comité de Comunicación, garantizando así que todos los stakeholders involucrados estén alineados y que la propuesta se ejecute de manera fluida y efectiva. La iniciativa ya cuenta con suficiente responsabilidad técnica y se espera que se discuta ampliamente en las próximas sesiones del consejo.
Este proyecto no solo representa una oportunidad para revitalizar y modernizar la infraestructura de Bogotá, sino que también es un paso hacia la consolidación de la ciudad como un hub logístico y comercial en la región. A medida que se avanza en la implementación de estas iniciativas, será vital que se preste atención a los aspectos de sostenibilidad y urbanismo, para así asegurar que el crecimiento económico no comprometa la calidad de vida de sus habitantes.
La posibilidad de atraer a compañías e inversionistas con un interés en desarrollar sus operaciones en Bogotá abre un abanico de oportunidades, no solo para el crecimiento económico, sino también para la creación de empleo y el fortalecimiento de la comunidad. Se anticipa que, a medida que se discuta esta propuesta en el consejo, se abrirán espacios para escuchar diferentes opiniones y sugerencias, enriqueciendo así el plan final.
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