El optimismo global sobre la vida personal ha alcanzado el nivel más alto en cuatro encuestas este año Brújula prioritaria FII 2025preparado Instituto de Iniciativas de Inversión Futura (FII) en colaboración con Ipsos.
El estudio, que encuestó a 61.316 personas en 32 países entre el 1 de agosto y el 5 de septiembre de 2025, revela que El 76 por ciento de los ciudadanos cree que las cosas van bien en sus vidaslo que supone un aumento de 16 puntos porcentuales respecto al año anterior. Además, el 48 por ciento cree que su país va en la dirección correcta (+14 puntos) y el 37 por ciento piensa lo mismo sobre el mundo (+13 puntos).
A pesar de estas mejoras, el informe advierte que La brecha entre el optimismo personal y el pesimismo colectivo todavía existe: la mitad de los encuestados cree que su nación y el planeta todavía están en el camino equivocado. En este escenario, Colombia refleja la dualidad entre la esperanza individual y la desconfianza en las instituciones.
El 80% de los colombianos encuestados dice que su vida va bien. foto:iStock
Percepción de dirección nacional
Según los datos disponibles en el portal FII Priority Compass, El 68 por ciento de los colombianos piensa que el país va por el camino equivocado, doc sólo el 32 por ciento cree que va en la dirección correcta.
Percepción del mundo eso es aun mas negativo: El 73 por ciento dice que las cosas van mal a nivel mundial y sólo el 27 por ciento lo ve con optimismo. En contraste, el 80 por ciento de los colombianos dice que sus vidas van bien, lo que refleja una mayor optimismo personal frente a un entorno nacional incierto.
Esta diferencia coincide con una tendencia global señalada en el informe, donde los residentes del Sur Global -del cual Colombia forma parte- muestran mayor nivel de esperanza personal que en los países del norte. Mientras que en el sur el 78 por ciento de los ciudadanos se sienten optimistas sobre su vida, en el norte ese porcentaje cae al 73 por ciento.
El 68% de los colombianos piensa que el país va por mal camino. foto:Juan Montaño / EL TIEMPO
La encuesta global FII Priority Compass 2025 se llevó a cabo en 32 países representa el 66 por ciento de la población mundial. La recolección de datos se realizó a través de entrevistas por internet a personas mayores de 18 años, siguiendo cuotas por género, edad, ocupación y zona urbana o rural. El objetivo del estudio es Identificar las preocupaciones y aspiraciones más apremiantes de los ciudadanos. en el contexto de cambios económicos, tecnológicos y sociales.
Entre las conclusiones generales, el 50 por ciento de los encuestados así lo cree. el costo de vida es su principal preocupación, seguido por el desempleo y pobreza (36 por ciento cada uno). A nivel mundial, el 77 por ciento exige que sus países desarrollen sus propios sistemas de seguridad. inteligencia artificial y 73 por ciento de extensión de valor vida más saludable, lo que muestra la creciente demanda de seguridad económica, digital y humana.
Prioridades de los colombianos
En Colombia, el estudio muestra que la delincuencia, la pobreza y el desempleo son las mayores preocupaciones. El 22 por ciento de los ciudadanos así lo cree. El crimen y la delincuencia son el principal problema del país, seguidos de la pobreza y las desigualdades sociales. con 16 por ciento, el desempleo y el terrorismo (12%), y el costo de vida junto con el sistema de protección social (10%).
En cuanto al bienestar personal, el 16 por ciento prioridad para tener un trabajo o un ingreso seguroEl 12 por ciento se centra en mantenerse físicamente sano y acceder a atención médica11 por ciento en sentirse a salvo del crimen y 10 por ciento en Cuida tu salud mental y bienestar emocional.
El informe muestra que Colombia está entre las naciones del Sur Global con mayor brecha entre optimismo personal y nacionaluna tendencia que, según los autores del estudio, refleja «una confianza creciente en las capacidades individuales de progreso en relación con la percepción de debilidad institucional».
A pesar del pesimismo sobre el rumbo del país y del mundo, el aumento del optimismo personal podría interpretarse como un signo de resiliencia. «La gente se aferra a la esperanza de mejorar sus vidas incluso cuando ven que el sistema no funciona», concluye el estudio.