
El Ministerio de Trabajo de Colombia ha lanzado una redefinición de su sistema de seguimiento laboral, en respuesta al creciente número de solicitudes de ciudadanos que muestran tensiones en el mercado laboral.
La entidad lanzó el modelo “Inspección con propósito”, estrategia que busca modernizar los procedimientos de vigilancia y garantizar respuestas más rápidas y focalizadas.
La iniciativa incluye seis perspectivas para asegurar que las intervenciones sean más específicas: género, para trabajadores con discapacidad, étnica con orientación antirracista, curso de vida, interseccional y diferencial. El objetivo es incluir a poblaciones tradicionalmente invisibles.
LEER TAMBIÉN
Con este nuevo esquema, las visitas de inspección priorizarán los casos relacionados con violaciones a la libertad sindical, episodios de violencia laboral, discriminación, incumplimiento de las normas de seguridad social y falta de seguridad y salud en el trabajo, sin descuidar la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia.
El plan se organiza en siete ejes estratégicos. Esto incluye una revisión territorial de las condiciones de trabajo, la protección de las libertades sindicales, un componente para sectores con alto grado de conflictividad y el seguimiento del desarrollo de la reforma laboral, sobre lo que se generarán informes mensuales.
Lupa sobre el sector rural
El eje rural recibe especial peso en el nuevo modelo. El ministerio afirmó que uno de sus objetivos es garantizar los derechos laborales de los trabajadores agrícolas y pequeños productores, grupo caracterizado por la informalidad.
La hoja de ruta prevé inspecciones preventivas a las pequeñas empresas agrícolas, así como a las empresas generales y reactivadas de la mediana y gran agroindustria. Según la entidad, estas inspecciones podrían dar lugar a un proceso de sanciones administrativas cuando se constate incumplimiento.
Jorge Enrique Bedoya, Presidente de la Asociación de Agricultores de Colombia (SAC). foto:Claudia Rubio
La estrategia también incluye asistencia técnica en territorios priorizados por el Acuerdo Final de Paz, con énfasis en los municipios del Pdet, donde las brechas laborales son más profundas.
La reacción del sector agrícola
El anuncio provocó reacciones en el sector agrícola. La Asociación Agropecuaria Colombiana (SAC) confirmó que su equipo jurídico se encuentra analizando la resolución.
Jorge Bedoya, presidente del gremio, recordó que la agricultura emplea a casi tres millones de personas, muchas de ellas en condiciones informales que superan el 80 por ciento. La SAC insistió en la necesidad de un régimen de trabajo diferenciado, que pudiera responder al carácter estacional del trabajo agrícola, y señaló que no hubo acuerdo al respecto durante el proceso de reforma laboral.
LEER TAMBIÉN
Otros sectores prioritarios
Además del sector agrícola, el modelo incluye inspecciones especializadas en otras industrias críticas. Estos incluyen trabajos portuarios, minería y energía, seguridad y vigilancia privada, trabajo doméstico y administración pública.
Para su verificación, el plan se apoyará en plataformas tecnológicas como Rutaport y Sisinfo, para contrastar información y monitorear el respeto a los derechos laborales.
*Esta nota fue preparada con el apoyo de AI y revisión de periodistas.