El sistema fiscal colombiano se basa en el IVA (impuesto sobre el valor agregado), que grava el consumo de bienes y servicios. Este impuesto es considerado uno de los pilares más significativos del sistema fiscal en el país, siendo fundamental para la recaudación de ingresos.
El IVA fue introducido en el año 1963, y desde entonces ha evolucionado para convertirse en una de las fuentes más robustas de financiamiento para el Estado, permitiendo que cada gobierno cumpla con sus objetivos económicos correspondientes durante su mandato.
Es importante destacar que hay ciertos productos y servicios que, debido a su naturaleza o a disposiciones legales específicas, están exentos de este impuesto en el momento de la compra. Esto es crucial para garantizar que ciertos sectores de la población no se vean afectados por la carga fiscal.
¿Para qué se recolecta?
El IVA, siendo un impuesto indirecto, juega un papel vital en la recolección de fondos que permiten al gobierno financiar diversas actividades estructurales y realizar transformaciones en sectores clave como la salud, la educación y la movilidad. Cada uno de estos sectores es fundamental para el desarrollo social y económico del país. Además, el IVA se emplea como mecanismo de financiamiento para diversos programas sociales dirigidos a beneficiar a la población más vulnerable.
Descubra los detalles del plan de reducción de impuestos. Foto:Izock
Actividades de IVA exentas, ¿qué significa eso?
Cuando se manifiesta que una actividad está exenta de IVA, se refiere a que ciertos pagos que, bajo condiciones estándar estarían sujetos a este impuesto, están excluidos por leyes específicas o por la naturaleza de la actividad misma. Generalmente, estas exenciones están justificadas por consideraciones de carácter social, educativo o cultural.
Por tanto, es evidente que el consumidor final se beneficia de esta regulación, ya que no debe asumir el costo del IVA en estas transacciones. Así, una empresa o individuo que ofrezca un servicio no debería cobrar ni transferir este impuesto a la entidad recaudadora.
Exención del IVA. Foto:Prosperidad social / istock
En términos prácticos, la exención de IVA es beneficiosa; sin embargo, es crucial tener en cuenta que existen implicaciones fiscales que dependen del tipo de exención aplicable. En algunas situaciones, la empresa que ofrece un servicio o producto no podrá reclamar el IVA que haya pagado en sus respectivas transacciones, lo que puede resultar en costos operativos significativos que no fueron considerados inicialmente en su planificación financiera.
¿Cuáles son las diferencias entre las actividades del IVA no sujeto y excluidas?
A pesar de que ambos términos pueden parecer similares a simple vista, hay una diferencia fundamental entre ellos. La primera categoría se refiere a actividades completamente fuera del alcance legal de los impuestos. En resumidas cuentas, las personas que llevan a cabo estas actividades están fuera del régimen tributario que exige el pago de este impuesto.
IVA y su exención. Foto:Rawpixel Ltd / Alamy Stock Photo
La segunda categoría se refiere a aquellos que están sujetos a regímenes específicos del impuesto, pero que por alguna normativa no cobran este impuesto en su actividad, lo que significa que esta entidad no está obligada a recaudar el IVA en condiciones normales.
Posibles extensiones
En el contexto fiscal colombiano, la posibilidad de obtener una exención del IVA puede depender de dos tipos principales. El marco legal del país determina las condiciones bajo las cuales una persona o empresa puede beneficiarse de deducciones relacionadas con los impuestos pagados en el desarrollo de su actividad principal.
- Completamente: Esta exención se aplica en su totalidad cuando un profesional o una empresa no cobra IVA al usuario, pero a su vez puede deducirlo de los insumos necesarios para llevar a cabo sus funciones.
- Limitado: La exención limitada se aplica cuando el comprador no está obligado a pagarIVA por el servicio recibido, aunque no podría deducir IVA por las compras realizadas que estén vinculadas a su actividad principal.
Debe saber si su profesión está exenta. Foto:Izock
Vertidos excepcionales de la profesión
- Alquiler de vivienda: el alquiler de propiedades residenciales está exento de IVA. Sin embargo, esta exención no se aplica a propiedades que se utilicen con fines comerciales o turísticos.
- Servicios de salud: servicios proporcionados por profesionales de la salud, los cuales califican para la exención, pero procedimientos estéticos no esenciales, como la mesoterapia o la acupuntura, no están incluidos.
- Ventas de tierra no urbanizables: el terreno que se vende sin infraestructura destinada para uso público o conservación cuenta con esta exención. Se justifica su destino público y no debe ser aplicable para tierras que pueden ser urbanizadas.
- Números de asistencia social: Las organizaciones sin fines de lucro que ofrecen servicios a las personas más vulnerables están exentas de IVA dado que se considera que estos servicios son esenciales para el bienestar social.
- Servicios financieros y de seguros: es esencial comprender que este tipo de operaciones están exentos de IVA siempre que estén regulados por la supervisión financiera de Colombia. No obstante, si estos servicios implican costos adicionales o están fuera de la normativa legal, la exención no será aplicable.
- Servicios de franqueo: servicios relacionados con el correo y la venta de sellos están eximidos de IVA, siendo considerados como servicios básicos regulados directamente por las autoridades estatales.
- Actividades culturales o artísticas: Todos los servicios prestados para la creación o difusión de obras culturales (como los de músicos, escritores, pintores y bailarines) están exentos, a condición de que se trabajen de forma independiente y en relación a sus actividades artísticas.
Ricardo Castañeda
Escribiendo las últimas noticias.
