







José ‘Pepe’ Mujica falleció el 13 de mayo, después de luchar valientemente contra un cáncer de esófago. Su esposa fue la encargada de anunciar esta triste noticia al público, y el actual presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, también confirmó el deceso.
«Con un dolor profundo, comunicamos que nuestro compañero Pepe Mujica ha muerto. Fue presidente, militante, referente y líder », afirmó Orsi en su mensaje.
En este mismo comunicado, agregó «Vamos a sorprenderte mucho querido. Gracias por todo lo que nos diste y por tu profundo amor por tu gente».
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, fue uno de los primeros en expresar sus condolencias a través de su cuenta de X. En su despedida, recordó a su amigo.
«Adiós amigo. Esperemos que algún día América Latina tenga un himno, y que su nombre sea Amazonas».
Petro continuó diciendo que, a su juicio, el proyecto de integración de América Latina sigue vigente, al igual que la idea de una Unión Grancolombia que consolidaría la unión en el corazón de América Latina y el Caribe.
Asimismo, Gabriel Boric, presidente de Chile, también expresó sus sentimientos sobre el fallecimiento de Mujica. En un mensaje que publicó desde Beijing, mencionó: «Pepe querido, me imagino que estás preocupado por la amarga ensalada que hoy es el mundo».
«Te vas físicamente, pero siempre estarás presente. Te prometo que el olivo que plantamos en febrero en tu finca florecerá».
Por su parte, Evo Morales, ex presidente de Bolivia, comentó: «Era un ferviente defensor de la integración y de la gran patria. Su legado y enseñanzas perduran».
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, también se despidió del ex presidente uruguayo, señalando que Mujica soñaba con un mundo mejor, por el cual siempre luchó.
«La política tiene sentido cuando se vive desde el corazón».
Luis Abinader, presidente de la República Dominicana, se unió a las voces de despedida con un mensaje emotivo en X.
«Lamento profundamente la partida de José ‘Pepe’ Mujica. Tuve el honor de conocerlo y aprender de su sabiduría y humildad».
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Pepe Mujica murió a los 89 años
Su esposa, quien hace poco confirmó que él se encontraba en la fase terminal de un cáncer de esófago, también indicó que recibió cuidados paliativos para manejar el dolor. Lucía Topolansky, ex vicepresidenta de Uruguay, reveló esto a la prensa.
En enero, Mujica había anunciado que la enfermedad se había diseminado por su cuerpo y, a sus 89 años, decidió no continuar con más tratamientos.
Topolansky aseguró que la situación actual es «Terminal» y explicó que están haciendo lo que sea necesario para que Mujica pueda vivir sus últimos días con la mayor calidad posible.
En relación a su ausencia en las elecciones regionales recientes, donde la izquierda triunfó en Montevideo, Topolansky mencionó que el desplazamiento fue demasiado complicado para él, y su médico había recomendado que no asistiera.
El presidente uruguayo, Yamandú Orsi, quien era cercano a Mujica, pidió respetar la privacidad de la familia en este difícil momento. «Cada uno de nosotros debe contribuir a cada etapa de la vida con dignidad. No hay que angustiarse; es un momento para reflexionar y dar paz a las personas», mencionó Orsi.
Mujica se convirtió en un símbolo de la izquierda latinoamericana, y su discurso anticonsumista le ganó seguidores no solo en su país, sino a nivel global.
“Me estoy muriendo”: Pepe Mujica
En enero de 2025, tras conocer la extensión de su enfermedad, Mujica compartió su realidad con el mundo en una emotiva entrevista, revelando que estaba enfrentando su mortalidad.
«El cáncer en el esófago ha colonizado mi hígado. No puedo detenerlo. ¿Por qué? Porque soy anciano y tengo dos enfermedades crónicas».
En esa misma charla, expresó que «no estaba en condiciones de recibir tratamientos o cirugías», y pidió que se respete su deseo de estar tranquilo, añadiendo: «Mi ciclo ya ha terminado».
«Me estoy muriendo. Y un guerrero tiene derecho a su descanso».
Su última aparición pública fue el 5 de diciembre, cuando recibió en su hogar a Gustavo Petro y a Lula da Silva. En aquel emotivo encuentro, Petro le otorgó la Cruz de Boyacá, y Mujica agradeció el reconocimiento, diciéndole que la paz y el diálogo siempre debían ser los medios para resolver conflictos.