La oficina del Fiscal General presentó a un juez de control de garantías a cinco miembros de la Policía Nacional, que habrían recibido obsequios para facilitar el transporte de madera obtenida ilegalmente en las áreas de la Reserva Forestal de Bolívar.
La policía acusada es el capitán Harold García Ospina, quien en el momento de los eventos era comandante de la estación de policía de Puerto Wilches (Santander); El subintendente Fabio Ignacio Ramírez Arismendy, comandante de patrulla de la estación de policía de San Pablo y patrulleros Edison Peña Moreno, en Yerber Fernando Rueda Correa y José Isabelino Gamboa Cabrera.
Según la entidad de investigación, estos uniformados habrían facilitado la transferencia del material maderero extraído del bosque originario de la Reserva Forestal del Río Magdalena, protegida por la ley al entregar información privilegiada a una organización dedicada a esta actividad para evitar los controles administrativos de la madera transportada y la ubicación de los puntos de control de las autoridades y sus cambios de trabajo.
Las especies más afectadas por esta explotación ilegal fueron el cedro rosado, el almendro, el Cambombo, los Chingales, Fresno, Blood Toro y Canguaro.
