Un fiscal de la Unidad de Vida de la sección Bogotá ha presentado cargos contra Juan Sebastián Álvarez Cruz y Julieth Zuluaga Aguirre por su supuesta implicación en el asesinato del Presidente del Tigres Fútbol Club, Édgar Páez Cortés. Este trágico crimen tuvo lugar el 23 de septiembre de 2023 en la ciudad de Bogotá, generando gran conmoción en el mundo del deporte y la comunidad local.
Los dos acusados enfrentan serias imputaciones que incluyen homicidio, así como la fabricación, tráfico, cojinete o posesión de armas de fuego, y también la posesión de accesorios, piezas o municiones no autorizadas. Además, se les imputa el uso de documentos falsos y la destrucción, supresión u ocultación de documentos públicos, todos estos comportamientos calificados como agravados, lo que implica que la gravedad de sus actos podría acarrear penas más severas si son hallados culpables.
De acuerdo con las investigaciones realizadas, se ha establecido que la pareja seguía constantemente los movimientos de la víctima. Se espera que los detalles adicionales del caso revelen cómo estos individuos pudieron planificar un ataque tan letal. Tras esperar a que el estadio del techo metropolitano se desocupara, donde su equipo había jugado un partido correspondiente a la primera categoría B del fútbol colombiano, decidieron seguir a Édgar Páez Cortez en una motocicleta hasta un punto específico en la ciudad de Puente Aranda.
Una vez en ese lugar, se señala que el hombre se acercó al líder deportivo, quien se encontraba en su vehículo privado. En un acto de violencia a plena luz del día, disparó varias veces contra el presidente del Tigres Fútbol Club, logrando así ejecutar su plan de manera trágica. Posterior a este ataque, se alega que entregó el arma de fuego a su compañero para que la escondiera, lo que apunta a un intento deliberado de ocultar pruebas y obstruir la justicia. Finalmente, la pareja logró escapar hacia el suroeste de la ciudad, lo que ha complicado aún más su captura y la recolección de evidencia.
Es importante destacar que, hasta el momento, ambos acusados no han aceptado los cargos en su contra. Esto podría indicar que están preparados para llevar el caso a juicio, donde se presentarán pruebas y se llevarán a cabo audiencias para determinar la culpabilidad de los acusados. La comunidad espera que la justicia prevalezca en este caso que ha tocado las fibras del espíritu ciudadano y el amor al deporte en Colombia.
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