Un juez de control de garantía ha dictado una medida de aseguramiento en un centro penitenciario contra Juan Camilo Muñoz Gaviria, conocido popularmente por los apodos de Teta o Teté. Esta decisión se tomó debido a su supuesto papel en el asesinato de una mujer trans que se identificaba como Sara Millerey González Borja, un trágico suceso ocurrido el 4 de abril en Bello, en el departamento de Antioquia.
La llegada a esta resolución por parte de la justicia se basó en el exhaustivo análisis realizado por la oficina del fiscal. Durante este proceso, se revisó detenidamente el material probatorio que compromete al presunto delincuente, lo que llevó a la acción judicial en su contra.
La pesquisa, que se desarrolla bajo la supervisión de un fiscal perteneciente a la sección de Medellín, ha revelado que el alias Teté, junto a otros hombres, habría estado involucrado en actividades delictivas que buscaban ejercer un control social ilegal sobre comportamientos criminales en la zona. Según los informes, estos individuos llevaron a la víctima a un terreno donde la torturaron, causándole lesiones graves en el tórax, además de golpearla con armas en las piernas. Este ataque se realizó en un marco de violencia extrema y abuso de poder en el que la comunidad local se vio afectada.
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Es importante destacar que, tras el brutal ataque, los agresores tomaron medidas adicionales para limitar la ayuda que los vecinos pudieran ofrecer a la víctima. Al parecer, el grupo delictivo intentó impedir que las personas del sector brindaran auxilio, lo que evidenció su intención de evitar que la mujer recibiera la atención médica necesaria. Sin embargo, a pesar de esta intervención, los familiares de Sara Millerey González Borja, junto con el equipo del cuerpo oficial de bomberos, lograron asistirla y la trasladaron a un centro de salud en Medellín. Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos, Sara falleció unas horas después debido a la gravedad de sus heridas.
Este caso ha generado una gran conmoción en la comunidad, resaltando no solo la vulnerabilidad de la población trans en Colombia, sino también la impunidad que persiste en diversas situaciones de violencia. Los actos de violencia hacia personas LGBTQ+ siguen siendo una problemática alarmante en el país, lo que subraya la necesidad de un enfoque más integral y comprometido por parte de las autoridades para garantizar la seguridad y los derechos de todos los ciudadanos.
Asimismo, se espera que el avance de la investigación culmine en la pronta identificación y captura de otros posibles implicados, lo cual podría proporcionar a la familia de la víctima un sentido de justicia y cierre tras este trágico evento. La sociedad civil también juega un papel crucial en la visibilización de estos temas y en la lucha constante contra la violencia y la discriminación que enfrentan las comunidades más vulnerables.