El Presidente del Tribunal Constitucional, Jorge Enrique Ibáñez, fue objetado nuevamente diciendo que retrasa una investigación de investigación de pensiones. El ciudadano Javier Romero presentó la apelación después de considerar que el magistrado ordenó evidencia «expuesta» e «innecesaria» para resolver el procedimiento. Desafían a los jueces de Ibáñez por demoras en la reforma de las pensiones.
Las solicitudes de Ibáñez son verificar la presencia del presidente Gustavo Petro en el llamado del llamado a reuniones inusuales y confirmar al grupo en la Cámara de Representantes durante la corrección de la carrera.
Lo acusan de «comportamiento expandido»
El Cherbering argumenta que estas decisiones buscan posponer la entrada en el valor de la ley. El documento presentado indica que el magistrado ocupa una posición de «opuesto sistemático» sobre la reforma del gobierno actual, que, según la acusación, plantea dudas sobre su imparcialidad.
Este es el tercer desafío contra Ibáñez en este proceso. El primero fue rechazado por el Tribunal de Justicia. La tensión aumenta porque las reformas de pensiones son una de las principales transacciones del gobierno de Petro, que aún está pendiente de revisión constitucional.
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Gobernador Rendón Advertencias sobre la corte
El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, describió el desafío como «presión peligrosa» sobre el tribunal constitucional. Defendió el derecho del magistrado a tomarse el tiempo necesario para analizar la evidencia y proteger la carta política.
La decisión de si Ibáñez se apartará del caso definirá el ritmo del proceso judicial. Por ahora, las reformas aún se posponen, mientras que se completa la recolección de 17 pruebas solicitadas por el tribunal.
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