El sustituto Felipe Ferro ha manifestado su descontento con los recientes cambios en el gabinete de la alcaldesa Johana Aranda en Ibagué. En sus declaraciones, Ferro enfatizó que estos cambios no deberían ser percibidos como una crisis política, sino más bien como una estrategia para revitalizar el liderazgo en la ciudad. Según él, es imperativo que Ibagué cuente con un liderazgo firme y claro para enfrentar los problemas apremiantes que afectan a la comunidad, como la creciente inseguridad, el alto índice de desempleo y las deplorables condiciones de las vías de acceso.
Ferro subrayó la necesidad de que Aranda tome decisiones audaces y significativas que alienten un cambio real. En su crítica, hizo alusión a la influencia que el exalcalde Andrés Hurtado parece mantener en la administración actual. Ferro sugirió que es crucial que la alcaldesa «sacuda» la estructura administrativa y empiece a ejercer un control más efectivo, liberándose de la sombra de Hurtado. Esta situación subraya la lucha interna de poder dentro de la administración de Ibagué, lo que, según Ferro, obstaculiza un verdadero avance en la gestión municipal.
Asimismo, Ferro hizo un llamado a dejar de lado los intereses y comandos políticos que han limitado la gobernanza de la ciudad. Reclamó la necesidad de restaurar una administración más transparente y eficiente, que priorice el bienestar de la ciudadanía sobre los intereses partidistas. Ibagué, destacó, ha estado sufriendo de una falta de dirección clara, lo cual se ha traducido en una disminución de la calidad de vida de sus habitantes. Durante su intervención, Ferro instó a que se tomen las riendas para abordar no solo la inseguridad, sino también otros problemas estructurales que han sido ignorados durante mucho tiempo.
El clima de inestabilidad y la falta de respuestas efectivas ante estos desafíos limitan el desarrollo social y económico de Ibagué. Ferro abogó por políticas que promuevan la creación de empleo y oportunidades para los jóvenes, quienes son los más afectados por la crisis actual. Además, recordó que es vital que la administración municipal reanude proyectos de infraestructura que mejoren la movilidad y la conexión entre diferentes sectores de la ciudad, asegurando así un avance real hacia una mejor calidad de vida para todos.
La opinión de Ferro ha resonado entre muchos ciudadanos que sienten que la administración de Aranda necesita proyectos y propuestas concretas que vayan más allá de simples cambios en el gabinete. Es evidente que la situación en Ibagué requiere un enfoque integral y un liderazgo capaz de movilizar a la población hacia una visión común de progreso y bienestar.
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